La Federación Ecuatoriana de Fútbol ha anunciado la abrupta salida de Félix Sánchez como director técnico de la selección nacional, apenas horas después de la derrota ante Argentina en los cuartos de final de la Copa América.
El partido, que culminó en empate 1-1 y se definió en penales, marcó el fin del camino para Ecuador en el torneo sudamericano.
Salida del director técnico del equipo ecuatoriano
En un comunicado breve pero contundente, la federación expresó: «El día de hoy se ha acordado la terminación del vínculo contractual con el director técnico Félix Sánchez Bas». Agradecieron a Sánchez y a su equipo por su trabajo y profesionalismo, deseándoles éxito en sus futuros proyectos.
El anuncio llega tras un enfrentamiento tenso con Argentina, donde Ecuador mostró una destacada actuación que llevó el partido hasta la definición por penales.
Sin embargo, la habilidad del portero argentino Emiliano ‘Dibu’ Martínez, quien atajó dos disparos clave, frustró las esperanzas ecuatorianas de avanzar en la competencia.
El técnico no cumplió con las expectativas esperadas
Félix Sánchez, de 48 años y con una trayectoria que incluye dirigir a la selección de Catar durante su papel como anfitriona del Mundial 2022, había tomado las riendas de Ecuador a principios de 2023.
A pesar de su optimismo y reconocimiento al equipo por su capacidad de competir con los mejores, el técnico español enfrentaba críticas por los resultados irregulares del equipo, especialmente en las eliminatorias al Mundial de 2026.
La decisión de la federación de prescindir de Sánchez refleja la presión acumulada por parte de la prensa y la afición ecuatoriana, que esperaban mejores resultados dados los talentos emergentes como Moisés Caicedo y Kendry Páez, ambos fichados por clubes europeos destacados.
La Copa América ha sido testigo de movimientos similares en otros equipos, como la renuncia del seleccionador jamaicano Heimir Hallgrímsson y la presión sobre técnicos como el mexicano Jaime Lozano y el estadounidense Gregg Berhalter. La competencia continúa ofreciendo emociones intensas y revelando la fragilidad de los liderazgos técnicos en el fútbol internacional.
Con la eliminación de Ecuador y la partida de Félix Sánchez, la federación ahora deberá buscar un nuevo timonel que pueda canalizar el potencial del equipo hacia logros más consistentes en futuras competencias internacionales.