En un esfuerzo por combatir el préstamo ilegal conocido como ‘gota a gota’ y proporcionar opciones financieras seguras, el Fondo para el Financiamiento del Sector Agropecuario (Finagro), ha lanzado una iniciativa innovadora destinada a beneficiar a los pequeños productores de la Economía Popular en Colombia.
Con una inversión inicial de $19.500 millones y respaldo del Ministerio de Agricultura, esta iniciativa busca proporcionar hasta $4 millones en créditos con subsidios significativos a la tasa de interés.
La Línea Especial de Microcrédito (LEM) permitirá a más de 72.000 pequeños productores acceder, a préstamos con un subsidio de hasta el 20% en la tasa de interés, válido por un período máximo de dos años. Esta medida forma parte de un paquete mayor de $528.000 millones destinados para el año 2024, con el objetivo de fortalecer la productividad rural y apoyar proyectos en el campo colombiano.
Alexandra Restrepo, presidenta de Finagro, resaltó la importancia de esta iniciativa: «Nos obsesiona que más productores de la Economía Popular puedan acceder a un primer crédito con el sistema financiero. Hemos diseñado esta Línea Especial de Microcrédito para proporcionar préstamos de bajo monto, reduciendo así la dependencia del ‘gota a gota’ que tanto daño ha causado a nuestra comunidad agrícola».
Respaldo del Gobierno Nacional
Uno de los puntos destacados de este programa, es el respaldo del Gobierno Nacional a través del Fondo Agropecuario de Garantías (FAG), que actúa como fiador cubriendo hasta el 90% del crédito.
Este respaldo permite que los pequeños productores, tradicionalmente excluidos del sistema financiero formal, puedan acceder a financiamiento seguro y evitar las prácticas abusivas de los prestamistas informales.
Para acceder a la LEM, los interesados deben ser pequeños productores con ingresos bajos o pertenecer a las categorías A, B o C del Sisben, y no haber tenido crédito con ninguna entidad del sistema financiero formal en los últimos dos años.
El proceso de solicitud se realiza a través de entidades financieras o cooperativas de confianza, que gestionan directamente los recursos con Finagro.
Esta iniciativa no solo busca mejorar la calidad de vida de los pequeños productores agrícolas, sino también promover un desarrollo económico sostenible en las áreas rurales del país.
Con el respaldo del gobierno y el compromiso de Finagro, se espera que esta nueva alternativa de financiamiento, contribuya significativamente a la inclusión financiera y al crecimiento económico de las comunidades más vulnerables de Colombia.