El personal de la salud de la ciudad, valientes hombres y mujeres que trabajan en jornadas agotadoras durante el aislamiento preventivo obligatorio, ya empieza a disfrutar de las rutas que la Alcaldía y Metro Cali dispusieron para su beneficio, comodidad y seguridad en materia de transporte público.
Se trata de la Ruta de la Salud del MIO, puesta en marcha esta semana y que incluye cinco recorridos por las zonas de la ciudad que mayormente concentran empresas del sector, la red hospitalaria y entes colaboradores.
A raíz de la emergencia sanitaria declarada por coronavirus (COVID-19) y en medio del pánico que ha generado la pandemia a nivel mundial, muchos profesionales de la salud enfrentaron situaciones de discriminación y rechazo por parte de un sector de la comunidad, sobre todo en el sistema de transporte masivo.
Yirlecen Rodríguez es una enfermera auxiliar que con frecuencia utiliza el servicio de transporte público para llegar a su sitio de trabajo. Ella manifiesta que abordando la Ruta de la Salud “llego más rápido y evito las discriminaciones”.
«Los buses de esta ruta nunca están congestionados, pasan con un intervalo de 10 minutos y nos ofrecen tranquilidad y confianza, además de representar una medida de control para quienes, a diario, estamos en contacto con otras personas”, expresó la auxiliar de enfermería.
Fiel a su oficio y plenamente identificada con las recomendaciones direccionadas a evitar la propagación del coronavirus en nuestra amada ciudad, Yirlecen no desaprovechó y habló de los buenos hábitos que sigue para protegerse y hacer lo propio con sus seres queridos.
«Es indispensable el lavado de manos con abundante agua y jabón. Al finalizar mi jornada laboral y estando en la puerta de mi casa, pongo en una bolsa el uniforme y los zapatos para, seguidamente, lavarlos. De inmediato, me ducho y desinfecto para poder acercarme a mis hijos y compartir tranquilamente con ellos”, detalló.
Vale la pena destacar que la Ruta de la Salud del MIO transporta a verdaderos héroes sin capa, que diariamente exponen sus propias vidas para beneficio de todos los caleños y caleñas. Merecen nuestra admiración y extremo respeto.