El Ministerio de Transporte de Colombia anunció que en 2025 se destinarán $103.000 millones para intervenir dos puntos críticos de la vía Bogotá-Orinoquía, una de las principales rutas de conexión entre la capital del país y la región de Orinoquía.
Los recursos, provenientes de las Fuentes Alternativas de Pago para Infraestructura (FIP), se enfocarán en los kilómetros 50+100 y 69+350, donde se realizarán mejoras significativas para optimizar la movilidad y seguridad de los usuarios.
Intervenciones en puntos clave de la vía
Los puntos identificados, ubicados en los kilómetros 50+100 y 69+350, han presentado dificultades para los viajeros debido a condiciones de tráfico, deterioro de la infraestructura y riesgos de accidentes. El gobierno está priorizando estas áreas para garantizar una circulación más fluida y segura. Las obras previstas incluyen el mejoramiento de la calzada, ampliación de la vía y la instalación de medidas de seguridad vial, como señalización y sistemas de iluminación adecuados.
En adición a las intervenciones en los puntos críticos actuales, el Ministerio de Transporte ha encargado la realización de estudios y diseños para otros 12 puntos de la vía Bogotá-Orinoquía. Este plan busca identificar de manera técnica y precisa las áreas que requieren intervención, permitiendo así una planificación eficiente para futuras obras. La meta es extender las mejoras a lo largo de toda la vía, lo que beneficiará a miles de conductores y contribuirá al desarrollo económico de la región.
🚧En 2025, destinamos $103.000 mill para intervenir 2 puntos críticos en la vía Bogotá-Orinoquía y elaborar los estudios y diseños de otros 12 puntos.💰Los recursos provenientes de las Fuentes Alternativas de Pago para Infraestructura (FIP) se invertirán en los km 50+100 y 69+350 pic.twitter.com/guOroMPiy8
— MinTransporte (@MinTransporteCo) January 15, 2025
Recursos provenientes de las Fuentes Alternativas de Pago
La inversión de $103.000 millones será financiada a través de las Fuentes Alternativas de Pago para Infraestructura (FIP), un mecanismo que ha permitido al gobierno ejecutar importantes proyectos viales sin afectar directamente el presupuesto nacional. Este modelo de financiamiento facilita la participación de sectores privados en proyectos de infraestructura, lo que acelera la ejecución de obras y mejora la calidad de la infraestructura vial del país.
La vía Bogotá-Orinoquía es una de las más transitadas del país, especialmente por vehículos pesados que transportan productos agrícolas, ganaderos y otros insumos hacia y desde la región de los Llanos. Mejorar su infraestructura tendrá un impacto directo en la seguridad vial, la eficiencia del transporte y la reducción de los tiempos de viaje. Además, se espera que las obras contribuyan al crecimiento económico de la región y a una mayor competitividad de los sectores productivos.
Este anuncio es parte del compromiso del gobierno colombiano con el mejoramiento y mantenimiento de la infraestructura vial en todo el país. El Ministerio de Transporte continúa trabajando en la ejecución de proyectos que no solo mejoren la movilidad, sino que también generen empleo y promuevan el desarrollo sostenible.
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